Martín siempre dibujaba antes de irse a dormir: hacía un dibujo en la pared y soñaba con eso.
Un día su perro entró a su dormitorio y tiró un frasco de pintura a la cama de Martín y manchó toda la cama.
Cuando volvió de la escuela escuchó un grito de su madre. Fue corriendo a su cuarto y vio toda la cama manchada y Martíno dijo:
- ¡YUJU!
Su madre lo miró muy enojada y lo dejó en penintencia por tres días.
Cuando se durmió en su cama soñó que él se transformaba en una mancha y se despertó y se puso a pintar la pared. Se volvió a dormir y soñó que todo lo que había dibujado se lo comía la mancha y la mancha se ponía en la puerta. Cuando despertó vio que todos sus dibujos no estaban ni la mancha de su cama y vio la mancha en la puerta.
Al otro día soñó que la mancha se tiraba por la ventana. Despertó y vio por la ventana un auto con la mancha y ese fue el fin de la mancha.
Ismael Gariazzo - 10 años
5to. año F